El 21 de julio es una fecha que siempre la recuerdo con un sabor agridulce, más bien ácida. Pasaron 12 años y hoy empiezo a transitar el 13vo. año desde que llegó el diagnóstico: “tenés esclerosis múltiple”, unas palabras que marcaron varias etapas durante estos últimos años. Algunas peores, otras para olvidar, y momentos que ocupan un lugar especial en mi memoria. Ahora estoy disfrutando las mieles de la movilidad de las piernas, porque después de casi 9 años caminando con muletas, habiendo vivido un impasse de 2 meses hace 2 años, y a causa de un brote volver a usarlas, desde hace 7 semanas de nuevo, la vida me regaló este tiempo caminando sin muletas, con las manos libres y con dientes … como dicen mis amigas. Ir al supermercado y llevar las compras repartiendo el peso en las dos manos, es un placer, entre otros tantos que ya describí. ¿Cuánto durará este periodo vacacional sin muletas? Quién sabe; mientras tanto disfruto el día a día, el famoso “sólo por hoy”. Esta parte está
Desde hace casi 15 años mi vida cambió, cuando me diagnosticaron Esclerosis Múltiple. Desde ese momento comencé un camino de adaptación, a veces mejor llevado y otras atragantado. Luego de un largo tiempo de cambios abruptos de sensaciones, sentimientos, impotencia e incertidumbre llegó el momento de poder compartir este espacio con todos los que quieran comprender a quienes vivimos con una enfermedad crónica, degenerativa y discapacitante. Empecemos este camino de comprensión y apertura.