Tener esclerosis múltiple es como un terremoto del que luego surgen los movimientos sísmicos secundarios, hay brotes, secuelas y consecuencias extras. Desde hace 2 años tengo una manera de caminar extraña a causa de dos brotes y sus posteriores secuelas que tuve en la pierna, que provocó la incorporación de muletas unas compañeras de viaje incondicionales. De hecho hasta que las tuve que usar -empecé con una y al cabo de un año y un nuevo brote se sumó la otra- pensé que el mayor descubrimiento era la aspirina. Para que se hagan una idea es como si suben y bajan un escalón constantemente, por ende la rodilla trabaja sin descanso. Hasta que en diciembre pidió un receso que no le concedí, hasta que tuve que hacerlo a la fuerza. La rodilla se trabó varias veces lo que me impedía estirarla o flexionarla. Ni apoyar el pie. El dolor era insoportable hasta que el hueso se acomodaba. El diagnóstico es de desgaste de hueso y problemas de ligamentos laterales en la pierna derecha a causa de
Desde hace casi 15 años mi vida cambió, cuando me diagnosticaron Esclerosis Múltiple. Desde ese momento comencé un camino de adaptación, a veces mejor llevado y otras atragantado. Luego de un largo tiempo de cambios abruptos de sensaciones, sentimientos, impotencia e incertidumbre llegó el momento de poder compartir este espacio con todos los que quieran comprender a quienes vivimos con una enfermedad crónica, degenerativa y discapacitante. Empecemos este camino de comprensión y apertura.