Al margen de saber que la esclerosis múltiple no es nuestra vida, pero si forma parte de ella, muchas veces pensamos que como afrontamos sus imprevistos así como sus apariciones en acción en nuestro día a día, pensamos o queremos creer, que nada más nos puede pasar. Como no si yA tenemos EM. Craso error! Un tropezón si fue caída. Estoy atravesando desde hace más de 3 meses y medio un periodo de “luna de miel” con la EM después de 10 años de desavenencias que hacían de la cotidianidad un desafío. Sin embargo, espero que esta vez no impere la regla, o lo común, que dice que como en todo matrimonio, la luna de miel se acaba. Un hecho fortuito me sorprendió de golpe de esta realidad que la EM no lo es todo . Sucedió el más conocido como un accidente doméstico - a cualquiera le puede pasar-, nada más y nada menos que una caída en el baño, después de ducharme. Resbalón y al suelo. La cabeza golpeó dos veces contra el piso, comprobando que los baldosas son duras, pero mi cabe
Desde hace casi 15 años mi vida cambió, cuando me diagnosticaron Esclerosis Múltiple. Desde ese momento comencé un camino de adaptación, a veces mejor llevado y otras atragantado. Luego de un largo tiempo de cambios abruptos de sensaciones, sentimientos, impotencia e incertidumbre llegó el momento de poder compartir este espacio con todos los que quieran comprender a quienes vivimos con una enfermedad crónica, degenerativa y discapacitante. Empecemos este camino de comprensión y apertura.