Estamos confundidos, y pretendo aclarar la diferencia. Alguna vez pensaron que accesible, no quiere decir grande. Si yo mal no recuerdo, Barrio S é samo, nos enseñ ó la diferencia. entre grande y pequeño y eso si, que lo tenemos claro. Aunque accesible parece que no, sino, a las pruebas me remito. Las entradas de lugares p ú blicos y privados, cometen los mismos errores. Las puertas de acceso no tiene rebaje, es m á s tienen escalones incorporados, que son una barrera, muchas veces, infranqueable. Por las puertas ni por equivocaci ó n entra una persona en silla de ruedas. Conste que abundan m á s de lo que pensamos. Hay lugares que tienen rampa, con la inclinaci ó n adecuada, y sacan pecho al reconocerlo, aunque se olvidan de colocarle, a la rampa, una barrera para agarrarnos. En otros casos, la inclinaci ó n, la pendiente, no entr ó en consideraci ó n al incorporarla. Por ah í no hay quien entre, ni salga, sin ayuda. Es entonces cuando con esfuerzo, o con la ayu
Desde hace casi 15 años mi vida cambió, cuando me diagnosticaron Esclerosis Múltiple. Desde ese momento comencé un camino de adaptación, a veces mejor llevado y otras atragantado. Luego de un largo tiempo de cambios abruptos de sensaciones, sentimientos, impotencia e incertidumbre llegó el momento de poder compartir este espacio con todos los que quieran comprender a quienes vivimos con una enfermedad crónica, degenerativa y discapacitante. Empecemos este camino de comprensión y apertura.